Puebla, Pue.- Dos de los tres ejecutados que fueron hallados en la ex hacienda de San Miguel Espejo, comunidad perteneciente al municipio de Puebla, ya fueron identificados por sus familiares. Se trató de vecinos de la junta auxiliar de Santa María Xocanatepec, población que colinda con el lugar de los hechos.
Los dos occisos respondían en vida a los nombres de Joel S., de 29 años de edad; y Adrián P., de 20 años de edad, mientras que el tercer finado continua en el servicio médico forense en calidad de desconocido.
Versiones ministeriales indicaron que la noche antes de su hallazgo, sus respectivas familias tuvieron noticias de ellos. Aunque las investigaciones continúan abiertas y por parte de la Fiscalía General del Estado (FGE) no se ha proporcionado mayor información, trascendió que los jóvenes fueron alzados por un grupo armado cuando circulaban en Xonacatepec.
Los tres viajaban a bordo de una camioneta Chevrolet Tahoe con placas de circulación 543-YUV de la Ciudad de México y en ella fueron llevados a terrenos de cultivo frente a la ex hacienda de San Miguel Espejo, donde los bajaron y les dieron el tiro de gracia.
Los peritos de la FGE hallaron en el lugar de los hechos tres cartuchos percutidos calibre GFL 308 WIN, que principalmente son empleados para la cacería.
Aunque la principal línea de investigación que siguen las autoridades ministeriales para poder esclarecer la triple ejecución, es que se habría tratado de un ajuste de cuentas entre bandas dedicadas al robo y trasiego de gas LP, no se descarta otra hipótesis.
La junta auxiliar de Santa María Xonacatepec, ha sido detectada por parte de autoridades estatales y federales, como un foco rojo por el robo y trasiego de hidrocarburo. Hasta esta junta auxiliar arriban varias unidades del transporte público, donde se surten del carburante, además de pipas de gas LP, de distintas empresas.
A mediados del mes de octubre del 2018, un grupo de huachicoleros quemaron una patrulla de la Policía Federal División Gendarmería, cuando los elementos ubicaron un microbús de la ruta 52 que era abastecida de gas por una pipa.
Al acercarse, los uniformados fueron rodeados y agredidos por un grupo de sujetos quienes lograron prender fuego a la patrulla.
Pero no es la primera ocasión que, en San Miguel Espejo, se realiza este tipo de hallazgos.
El pasado 18 de enero del año en curso, fueron hallados dos cuerpos desmembrados con un mensaje sobre terrenos de cultivo. Tras los hechos se informó que los occisos eran padre e hijo, quienes fueron levantados por un grupo armado en la comunidad de Chachapa, perteneciente al municipio de Amozoc.
El doble asesinato se vinculó a disputas entre bandas dedicadas al robo de hidrocarburo.